Mamá Flor le pidió a Magaly Medina se ponga un hermoso vestido rojo hecho a croché y la periodista lo cumplió. Mamá Flor es una interna de 72 años de edad y realiza este tipo de trabajos como cientos de internas con la única finalidad de sobrevivir económicamente.
La Urraca no solo presentó su vestido "canero", sus aretes y pulseras, sino también dedicó parte de su programa de regreso a la televisión a las mujeres que conoció en sus 76 días de reclusión y de los cuales tendrá un grato recuerdo.
Así también, la mujer de prensa recordó algunos instantes de sus largos días en el penal.
"Después de salir de la cárcel no he podido llorar. Aún no puedo descongelar mi corazón. La cárcel me ha golpeado y me marcará hasta el final de mis días. Sin embargo, muchos saben que sufro de depresión crónica que la he tenido controlada", expresó sentida la periodista.
Agregó que, para no quebrase tuvo que prestar más atención a las situaciones que la rodeaban en el penal, como los muchos casos de mujeres que purgan condena. "Tuve que preocuparme por otras angustias", añadió.
Finalmente, agradeció las innumerables muestras de cariño que fueron expresadas en cartas desde el extranjero, la visita de sus reporteros y colaboradores así también a los auspiciadores y amigos que hicieron por un momento del set de Magaly Teve un pequeño Edén de bienvenida.
La Urraca no solo presentó su vestido "canero", sus aretes y pulseras, sino también dedicó parte de su programa de regreso a la televisión a las mujeres que conoció en sus 76 días de reclusión y de los cuales tendrá un grato recuerdo.
Así también, la mujer de prensa recordó algunos instantes de sus largos días en el penal.
"Después de salir de la cárcel no he podido llorar. Aún no puedo descongelar mi corazón. La cárcel me ha golpeado y me marcará hasta el final de mis días. Sin embargo, muchos saben que sufro de depresión crónica que la he tenido controlada", expresó sentida la periodista.
Agregó que, para no quebrase tuvo que prestar más atención a las situaciones que la rodeaban en el penal, como los muchos casos de mujeres que purgan condena. "Tuve que preocuparme por otras angustias", añadió.
Finalmente, agradeció las innumerables muestras de cariño que fueron expresadas en cartas desde el extranjero, la visita de sus reporteros y colaboradores así también a los auspiciadores y amigos que hicieron por un momento del set de Magaly Teve un pequeño Edén de bienvenida.
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